Como debe ser una buena bodega

¿Cómo debe ser una ‘buena bodega’? Las condiciones de la bodega serán determinantes para la evolución y la conservación del vino. A continuación describimos las características más importantes que debe poseer una buena bodega: - Una temperatura constante, entre nueve y doce grados. - Una humedad constante entre un 65 y un 80 por ciento. - Un suelo de tierra o arena de río. - Oscuridad, para favorecer la armonía en la evolución del vino. - Silencio. Debe estar apartada del tráfico cercano y de motores, ya que el ruido y las vibraciones removerían los posos y evitarían el envejecimiento armonioso. - Limpieza. La bodega solo debe oler a vino. Nunca deberán guardarse en una bodega otros productos como frutas, verduras… - Las botellas deben mantenerse en posición horizontal. El corcho debe permanecer en contacto con el vino, para que permanezca húmedo y evite el paso del aire.